Ofrece a tus clientes una cena romántica inolvidable de San Valentín con las Experiencias de OpenTable. Son facilísimas de configurar y lo más probable es que ya tengas promociones y eventos especiales, como el brunch o la hora feliz, que puedes renovar y proponer como experiencias. Y una vez que hagas eso, gozarás de los beneficios de nuevas oportunidades de marketing, de liquidez por anticipado y de un servicio optimizado y más predecible.
Dado que se acerca el Día de San Valentín, tenemos algunas ideas para transformar la atención que ya ofreces en una experiencia capaz de crear recuerdos inolvidables para tus comensales. ¡Y todo con el mínimo esfuerzo!
Convierte lo que ya estás haciendo en Experiencias
Es muy fácil olvidarnos de lo especial que es lo que sucede en un restaurante semana tras semana. Pero categorizar estos momentos como las experiencias que realmente constituyen suele ser la forma más precisa de presentárselas a los clientes.
Estos son algunos de ejemplos de cómo transformar la atención que ofreces en Experiencias de San Valentín:
Hora feliz
No todas las parejas que quieren festejar tienen el tiempo ni el dinero para un menú de degustación. Unos días antes de San Valentín, cámbiale el nombre de siempre a la hora feliz y ponle “Hora feliz de San Valentín”. Promociona el salón acogedor o mesas en la barra para dos, así como cualquier oferta especial de bebidas o comidas que les pueda llegar a interesar a los más románticos. Por ejemplo, dos por uno en ostras u ofertas especiales en un vino espumoso.
Menús de precio fijo
Si tu menú habitual incluye un menú de precio fijo o de degustación, ahí tienes una experiencia de San Valentín. Es tan sencillo como presentarla como una cena romántica que requiere un pago anticipado. Esta estrategia reduce las inasistencias, agiliza las operaciones y les simplifica las cosas a los comensales. También puedes ofrecer alternativas, como complementos de lujo (trufas blancas rayadas, u otra cosa que quieras crear) para aumentar los ingresos.
Brunch de fin de semana
Dado que este año San Valentín cae un día entre semana, es posible que muchos clientes celebren el fin de semana anterior o posterior a esa fecha. Esta es una oportunidad ideal para darle un giro al brunch habitual y convertirla en una experiencia de brunch festiva. Una forma simple de hacerlo más especial es incentivar a los comensales a pedir botanas y postres para así luego servir la comida en pasos, lo cual resalta lo especial de la ocasión. Aprovecha la oportunidad para destacar la barra de tragos, con una mimosa o un bloody mary, si es que la barra forma parte de tu brunch habitual.
Comidas especiales
Dado que este año San Valentín cae un día laborable, puedes promocionar el almuerzo especial habitual para días de la semana con dos o tres platos. Puede ser una opción interesante para quienes trabajan desde casa, sobre todo porque es muy probable que las parejas con hijos ya tengan resuelto el cuidado de los niños durante el día. Tú puedes ayudar a esas parejas a escabullirse y a hacerse un lugarcito al mediodía para celebrar el amor.
Maridajes con bebidas
Aprovecha el clima festivo para ofrecer bebidas que maridan bien con la comida. Puedes ofrecer maridaje de vinos, cervezas, cócteles y de bebidas sin alcohol para cada plato o menú degustación, aunque es posible que ya hagas esto.
Menú de postres
Si tienes un pastelero, considera la opción de ofrecer una experiencia de postres en San Valentín para incentivar a las parejas a comer algo rico y dulce cerca del cierre del turno o en horarios de menor ocupación. Puedes ofrecer el menú de postres habitual y el menú de tragos y bebidas o probar con una degustación de postres con varias porciones mini.
Artículos de cortesía
Muchos restaurantes venden salsas envasadas, recetarios, camisetas y otros productos comerciales de marca. Si vendes mercancía, puedes incluir un artículo en un menú de precio fijo y ofrecerlo como una Experiencia. Muchos clientes te agradecerán la oportunidad de matar dos pájaros de un tiro: una salida romántica más un obsequio de San Valentín. También puedes hacer que el pastelero prepare un regalito para llevar, como un frasco de granola o algunos scones, para que los clientes lo disfruten al otro día.
Formas fáciles de mejorar la atención
Hay miles de oportunidades de aprovechar lo que ya ofreces y convertirlo con un esfuerzo mínimo en Experiencias para que los comensales disfruten. No obstante, si quieres lucirte, también hay formas de crear Experiencias de San Valentín románticas e inolvidables para los clientes superespeciales.
Brindis con champaña
Agrega ofertas especiales de copas de vino espumoso y ofrécelas como Experiencias de brindis con champaña. Esto les da la oportunidad a las parejas de celebrar el amor de forma más discreta, pero sigue siendo una ocasión festiva y romántica.
Arreglos florales
Ambientar la escena es importante y pocos detalles son más románticos que las flores frescas. Puedes asociarte con un florista local para crear cierto clima en el restaurante y sobresalir frente a la competencia, tanto en persona como en Instagram, u ofrecer ramos de flores como complemento de una Experiencia.
Paquetes de propuestas de matrimonio
En San Valentín, los restaurantes suelen ser el escenario de muchas propuestas de matrimonio. Aprovecha la ocasión y prepara una Experiencia para quienes quieren hacer la gran pregunta. Una Experiencia de propuesta puede incluir un menú especial, el servicio de ocultar el anillo, un mesero dispuesto a tomar fotos y una copa de champaña.
Donaciones
Una linda forma de incentivar a los clientes a que reserven —e incluso a que paguen por adelantado— es donar una parte del costo (ya sea un porcentaje del precio o un importe en dólares) a una entidad benéfica que les interese.
Menú afrodisíaco
Crea un menú festivo y temático agregando un ingrediente afrodisíaco a cada plato. Dicen que las ostras, los higos, y las fresas propician el ambiente para el amor. El efecto de estos ingredientes quizás sea dudoso, pero es una manera divertida de darle rienda suelta a la creatividad en los menús y de estimular a los clientes.
Música ambiental
La música en vivo indicada —un piano o un trío de jazz— realmente aviva el romanticismo. Si decides musicalizar la Experiencia, no olvides detallarlo en la descripción. Aunque contratar músicos no esté dentro de tu presupuesto, este San Valentín puedes armar una lista de reproducción íntima que les llegue los comensales.
Cuando veas lo fácil que es configurar una Experiencia, empezarás a ver cómo puedes organizar otras en días festivos y también en cualquier otro momento del año.
Descarga nuestra lista de verificación para ver más consejos sobre cómo hacer que el Día de San Valentín sea todo un éxito.